La Sociedad de Clases

 Buenos días y felices fiestas, esta entrada va a tratar sobre en que se estructura la sociedad de clases.

La Sociedad de Clases es un término que se empezó a usar en el siglo XIX para hacer referencia a la nueva estructura social que apareció junto con la llegada del Nuevo Régimen y la Revolución Industrial.

Esta nueva estructura social tiene bastantes diferencias con el sistema social anterior, la Sociedad Estamental, dado que en la primera desaparecen los estamentos y los grupos privilegiados y no privilegiados, y en cambio aparecen clases, las cuales se dividen según la riqueza de cada persona, independientemente de la familia o de su situación al nacer o al morir. Esta, se divide principalmente en dos grandes grupos, la burguesía, la clase dominante y acomodada, que tiene un mayor poder adquisitivo, esta clase se podía encontrar también en la sociedad del Antiguo Régimen dentro del estamento de los no privilegiados, pero tras las revoluciones liberales esta se hizo con el poder político y económico al exterminar los privilegios de la nobleza y tener los trabajos más bien pagados y estar en una muy buena situación social.

En cambio, en la otra clase, la clase trabajadora, el proletariado, se encuentran principalmente los obreros de las fábricas, los cuales, a diferencia de los burgueses, tiene un poder económico mucho menor prácticamente basado en la subsistencia y tienen que soportar unas condiciones laborales muy duras. Este grupo social tuvo que aguantar unas condiciones de vida horribles hasta que poco a poco fueron adquiriendo una mayor calidad de vida, pero aún así la clase dominante siempre iban a ser los burgueses, esta diferencia entre clases se puede ver sobre todo en la primera Revolución Industrial, en la cual en gran parte de los casos tenían que ir a trabajar a las fábricas incluso mujeres o niños menores de diez años.

Esta nueva estructuración social también traería con sigo una de las principales características de la sociedad actual, el poder del dinero socialmente, antiguamente allá por el Antiguo Régimen los más aventureros aspiraban a adquirir un título nobiliario gracias a una gesta para así poder diferenciarse del pueblo llano, pero desde las revoluciones liberales el sueño pasó a ser el de amasar grandes riquezas, es por esto por lo que empezó a crecer en Gran Bretaña un espíritu empresarial muy fuerte entre la población más valiente y que querían diferenciarse de los obreros y de su pésima calidad de vida.

En esta idea ya se adelantó un poeta español, Francisco de Quevedo, en su obra Poderoso Caballero es don Dinero. Que cada cual la saque su sentido al poema, os lo dejo aquí para acabar esta entrada.

Madre, yo al oro me humillo,

él es mi amante y mi amado,

pues de puro enamorado

de continuo anda amarillo.

Que pues doblón o sencillo

hace todo cuanto quiero,

poderoso caballero

es don Dinero.

Nace en las Indias honrado,

donde el mundo le acompaña;

viene a morir en España

y es en Génova enterrado.

Y pues quien le trae al lado

es hermoso, aunque sea fiero,

poderoso caballero

es don Dinero.

Es Galán y es como un oro,

tiene quebrado el color;

persona de gran valor

tan cristiano como moro;

pues que da y quita el decoro

y quebranta cualquier fuero,

poderoso caballero

es don Dinero.

Son sus padres principales,

y es de nobles descendiente,

pues que en las venas de Oriente

todas las sangres son reales.

Y pues es quien hace iguales

al duque y al ganadero,

poderoso caballero

es don Dinero.

¿Más a quién no maravilla

ver en su gloria, sin tasa,

que es lo menos de su casa

doña Blanca de Castilla?

Pero pues da al bajo silla

y al cobarde hace guerrero,

poderoso caballero

es don Dinero.

Sus escudos de armas nobles

son siempre tan principales,

que sin sus escudos reales

no hay escudos de armas dobles;

y pues a los mismos robles

da codicia su minero,

poderoso caballero

es don Dinero.

Por importar en los tratos

y dar tan buenos consejos

en las casas de los viejos

gatos lo guardan de gatos;

y, pues él rompe recatos

y ablanda al juez más severo,

poderoso caballero

es don Dinero.

Y es tanta su majestad,

aunque son sus duelos hartos,

que con haberle hecho cuartos

no pierde su autoridad.

Porque pues da calidad

al noble y al pordiosero,

poderoso caballero

es don Dinero.

Nunca vi damas ingratas

a su gusto y afición,

que a las caras de un doblón

hacen sus caras baratas;

y, pues les hace bravatas

desde una bolsa de cuero,

poderoso caballero

es don Dinero.

Más valen en cualquier tierra

(mirad si es harto sagaz)

sus escudos en la paz

que rodelas en la guerra.

Y pues al pobre le entierra

y hace proprio al forastero,

poderoso caballero

es don Dinero.